Pollo ahumado con salsa jamaiquina

Instructions

1. Instrucciones Para Preparar La Salsa Jamaiquina:
   

   Ponte unos guantes de látex y corta los chiles en cuartos. Elimina lo que tienen por dentro, incluyendo las semillas.

2. En un frasco o botella de vino vacía, combina la salsa de soja, vinagre, pimienta de Jamaica y chiles. Tapa el frasco y agítalo un par de veces. Deja que la mezcla repose durante al menos 1 día, a temperatura ambiente (si la dejas por una semana es todavía mejor). El sabor de la salsa va a mejorar a medida que pase el tiempo, y puede ser almacenada a temperatura ambiente por varios meses.
3. Instrucciones Para Preparar El Pollo:
   

   Enciende los carbones y espera unos 15 minutos, hasta que estén cubiertas en cenizas grises y brillen en color rojo. Puedes crear dos áreas de calor, añadiendo diferentes cantidades de carbón a cada lado de la parrilla (o dejando una de las mitades vacías para tener una zona fresca). Coloca una capa de uno o dos carbones de profundidad para lograr un área de temperatura media-alta. Para obtener una zona de temperatura baja, esparce unos pocos carbones uniformemente en ese lado de la parrilla. Engrasa bien la rejilla.

4. Coloca las astillas de madera en el centro de un pedazo cuadrado de papel de aluminio de 1 pie de largo. Rocíalas con las bayas de pimienta de Jamaica, el tomillo y el romero, y cúbrelas con otro pedazo cuadrado de papel de aluminio. Dobla los lados para formar un paquete plano de aproximadamente 6 pulgadas cuadradas. Utilizando un cuchillo de cocina, abre agujeros en toda la parte superior del paquete. Colócalo sobre los carbones en la zona de la parrilla con temperatura media- alta (si estás usando una parrilla de gas, levanta la rejilla y coloca el paquete directamente sobre la hornilla).
5. Sazona el pollo por todas partes con sal y pimienta. Cuando el paquete de astillas de madera comience a emitir humo, coloca las piezas de pollo en la parrilla, con la piel hacia abajo, directamente arriba del lugar donde está ubicado el paquete. Asa los muslos de pollo durante unos 15 minutos, volteándolos cada pocos minutos, hasta que estén rostizados por todas partes y bien cocidos por dentro (si insertas un termómetro de lectura instantánea en la parte más gruesa del pollo, debe indicar una temperatura de 165°F). Retira los muslos y colócalos en un plato. Déjalos reposar por unos minutos antes de servirlos.
6. Rocía la salsa sobre el pollo y sírvelo con salsa extra a un costado.